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A mí no me mires:

Si te atornillan, destorníllate.

destornillador

                    En medio de una inflación de trabajo que amenazaba con ponerme al borde de un ataque de nervios y robarme de mala manera la sonrisa, he sabido reaccionar a tiempo y fervorosamente he aplicado las cinco reglas básicas que para estos momentos tan neuróticos, aprendí de mi tio Julio, catedrático de pasotismo ilustrado por la Universidad de Noteenteras Contreras. A saber:
  1. Agarrar el trabajo más urgente y mandarlo a paseo o hacer un corta y pega con los mil y un recursos que tienes en el ordenador que para eso eres una profesional como la copa de un pino.
  2. Preparar un cóctel largo, suave pero contundente, por ejemplo, el que inventaron los mineros rusos para llevar mejor lo suyo, el screwdriver, o destornillador, una parte de vodka y dos de zumo de naranja.
  3. Mantener la sonrisa evocando momentos plenos de felicidad, a ser posible, compartida.
  4. En vez de acabar los trabajos urgentes, dedicar un tiempo a hacer algo perfectamente prescindible.
  5. Una vez terminado el momento de stress, y cuando hayan surgido los efectos de la bebida, continuar con los deberes pendientes, pero sin agobios, porque para terminarlos hay más días que longanizas.

       Eso es precisamente lo que he hecho, y para que quede constancia, escribi, como labor perfectamente prescindible, la siguiente décima o espinela, sobre las ventajas de vivir al día, mientras saboreaba mi destornillador, y una vez bien bien destornillada te iba acariciando mentalmente una parte de tu cuerpo desnudo que, por pudor, no pienso detallar aquí.

No te preocupes en vano,
deja de planificar,
no por mucho madrugar,
amanece más temprano.
A gozar, que eso es lo sano
y a vivir alegremente
que son tres días solamente,
el primero estás de baja,
el otro no se trabaja,
y en el del medio haces puente.

 

 

1 comentario

Laura -

Me tienes alucinada con tus escritos.
He copiado todo lo de este post con foto incluida, y lo he colocado en mi mesa de trabajo, para cumplir esos puntos básicos para no agobiarse.
Mereces muchas más cosas, pero en otro sitio. Enviame un email y te lo contaré.