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A mí no me mires:

Cariño gallego

Cariño gallego Sentados un mirador, con todo el mar delante, y contemplando el perfil de un pueblecito de la Galicia cantábrica llamado Cariño, Julio se siente cariñoso y me confiesa:

-He llegado a una edad en que las mujeres que me gustan, no me quieren y las que me quieren, a mi no me gustan.
-No creo que sea necesario llegar a tu edad para eso. A mí también me suele pasar.
-Sí pero es que tú, desde siempre, has colocado muy alto el listón. No hay que ser tan utópica.
-Pues aplícate tú también el cuento.
-Eso es lo malo del asunto. Yo creía que al hacerme mayor iba a ser menos drástico en este asunto. Todo lo contrario. Soy más exigente que nunca.
-Te puede la estética.
-Pues sí, tienes razón, la belleza es mi droga. Una droga cada vez más escasa, y más adulterada. Desgraciadamente compruebo que estamos rodeados de gente cada vez más fea.
-A mí me da la impresión de que tú no has sabido querer de verdad- Parece mentira que yo te diga esto, cuando tendrías que decírmelo tú a mi. Creo que has tenido muchas pasiones, pero poquísimos amores. El amor, de por sí, crea belleza, o maquilla cualquier posible defecto. Es lo que se suele decir en la Argentina.
-¿Qué es lo que se suele decir en la Argentina?
-“Si tienes un amigo tuerto, míralo de perfil”.
-Por suerte, tú tienes los dos ojos muy bien puestos en su sitio.


Y yo, boba, bobísima, me dejo engatusar, una vez más, por este viejo tiburón,.

1 comentario

Claudio -

La belleza... la droga que más engancha, y la más traicionera.