Oscar.
Se pone el sol en una tarde de primavera adelantada, mientras Fred Bongusto me canta muy bajito al oido, una vieja canción con versos que hablan de ti: Tu sei per me la più bella del mondo La vida se transforma y se renueva con sólo una sonrisa y un gesto de cariño. El onanismo de la soledad se derrite al calor de una caricia. Me sonríes con amor y al fijarte en mí, te contemplo como la mujer más bella del mundo. Me has convertido en la protagonista de una película en donde yo soy actriz, guionista y directora. Y todo mi loco batiburrillo de imágenes, el flashback lleno de tiempos muertos, el caprichoso travelling, los desencuadres y el caos de secuencias que venían de ningún sitio y se dirigían a ninguna parte, en definitiva, esa película sin pies ni cabeza en la que se estaba convirtiendo mi vida, se ordena, resplandece, adquiere sentido y se convierte en una obra maestra, solo porque estás tú. Y en la gala de los sueños, eres tú la que me premias con el Oscar. |
1 comentario
Laura -
Para mí todos tus besos....