Erika. ¿Quién si no?
¿Qué decir de ella que no resulte apasionado?
¿Cómo puedo describir objetivamente a una mujer
cuyo recuerdo aún me estremece la piel?
Es completamente distinta a mí.
Más reflexiva,
más silenciosa,
más seria,
pero tiene un trasfondo de ternura inmensa,
que nunca ha salido a la superficie,
no sé por qué,
pues la frágil y exquisita sensibilidad
que oculta bajo siete llaves
es lo más hermoso de esta mujer
que es bella hasta decir basta.
No sé qué va a hacer conmigo,
ni me importa.
Que me lleve y me traiga,
que me entre y me saque,
que me bese
y me devore
y me acaricie
y me estruje.
Yo solo sé que cuando ella se ríe
se ilumina el mundo.
Y que he decidido convertirme
en su payasita de guardia.
¿Cómo puedo describir objetivamente a una mujer
cuyo recuerdo aún me estremece la piel?
Es completamente distinta a mí.
Más reflexiva,
más silenciosa,
más seria,
pero tiene un trasfondo de ternura inmensa,
que nunca ha salido a la superficie,
no sé por qué,
pues la frágil y exquisita sensibilidad
que oculta bajo siete llaves
es lo más hermoso de esta mujer
que es bella hasta decir basta.
No sé qué va a hacer conmigo,
ni me importa.
Que me lleve y me traiga,
que me entre y me saque,
que me bese
y me devore
y me acaricie
y me estruje.
Yo solo sé que cuando ella se ríe
se ilumina el mundo.
Y que he decidido convertirme
en su payasita de guardia.
3 comentarios
Toni -
Nos vemos, xao!!
Lore -
Si me vieras, te reirías como ahora me estoy riendo yo de mí misma. Pero lo paso genial.
No le he dicho a Erika nada de mi blog. Ella sabe que lo tengo, pero no le he dado la dirección. Y creo que ella también tiene uno, pero tampoco me ha dicho donde. Creo que es más bonito que un día nos encontremos casualmente navegando por la red, ¿no crees?
Toni -